El calostro es el primer alimento y agente protector de los lechones, el cual se produce durante las primeras 24 a 48 horas después del parto. Para un lechón recién nacido, ingerir calostro durante las primeras 6 horas de vida, es crucial para un comienzo saludable, ya que el intestino comienza a perder permeabilidad disminuyendo la absorción de la inmunoglobulina.

Así mismo, después de las seis horas posparto, la concentración de igG disminuye a un 50-65% de la concentración original, y después de 24 horas, disminuye hasta un 10-15% de la concentración de IgG inicial. Por tal motivo, es tan importante que un lechón recién nacido consuma calostro lo antes posible después del nacimiento. Por otra parte, se recomienda que el consumo adecuado sea de 200 ml de calostro en las primeras 24 horas de vida.

Los lechones nacen sin anticuerpos contra patógenos y solo los obtienen por medio de la ingesta de calostro, que les proporciona nutrientes importantes y anticuerpos que promueven la inmunidad y crecimiento general de los lechones. Para garantizar aprovechamiento óptimo de los nutrientes.

Aportes y beneficios del suministro de calostro en lechones

El consumo de calostro garantiza el aporte de vitaminas A, D y E, calcio, fosforo, zinc y alto contenido de inmunoglobulinas, proporcionando a los lechones anticuerpos maternos, los cuales están adaptados a los patógenos existentes en la unidad de producción. Así mismo, contiene factores de crecimiento que favorece el desarrollo de órganos, en especial el sistema digestivo con la finalidad de optimizar la digestión y absorción de nutrientes.

Por otra parte, el estrés por frío es uno de los factores críticos que más afecta a la supervivencia del lechón recién nacido. Se debe tener en cuenta que el lechón va a experimentar un cambio muy brusco de temperatura ambiente, en torno a 15-20º C, entre la temperatura del útero de la cerda (39ºC) y la temperatura ambiente de la sala de partos (20-24º C). Adicionalmente, el lechón recién nacido tiene escasas reservas corporales de grasa, lo que implica que depende enormemente de las grasas y carbohidratos presentes en el calostro para mantener su temperatura corporal. Así, una deficiencia energética tras el nacimiento puede conducir a un estado de hipotermia.

Influencia del encalostramiento en la salud y rendimiento de los lechones

Existen diversos estudios que mencionan la importancia del encalostramiento para la salud de los lechones, indicando que, una alta ingesta de calostro de 200 ml, mejora la tasa de supervivencia al destete, el consumo de calostro por encima de 290 ml/lechón al nacimiento se traduce en una mayor ganancia de peso a las 6 semanas de vida (>2 kg), mientras menor sea el intervalo entre el nacimiento y la primera ingesta de calostro, menor será la mortalidad predestete.

La ingestión de calostro (g/ kg peso vivo) tiene un importante efecto sobre la sobrevivencia de los lechones, donde existe relación entre el consumo de calostro, peso de lechones y el porcentaje de mortalidad temprana, evidenciando que los lechones con mayor consumo de calostro muestran mayor peso.

A así mismo, según estudios el porcentaje de mortalidad en camadas, tendrá una disminución drástica a medida que es mayor consumo de calostro. El tamaño de la camada también toma importancia, ya que mientras mayor sea número de lechones, el consumo de calostro por lechón disminuye.

En tal sentido, es primordial garantizar el consumo de calostro de todos los lechones por camada. Con la finalidad de asegurar el mayor numero de lechones destetados, junto a las demás practicas de manejo que son necesarias aplicar en la maternidad.

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